Bette Davis

Una actriz legendaria

 

The dark horse

 

 

Ficha artística y técnica

Una película First National para la Warner Brothers (1932)

Dirección: Alfred E. Green

Guión: Joseph Jackson y Wilson Mizner, basado en un argumento original de Melville Grossman, Joseph Jackson y Courtenay Terrett

Reparto: Warren William, Guy Kibbee, Bette Davis, Frank McHugh, Vivienne Osborne, Sam Hardy, Robert Warwick, Harry Holman,

Charles Sellon, Robert Emmett O'Connor, Berton Churchill

 

 

 

Argumento: Una situación sin salida en la convención gubernamental del Partido Progresista da como resultado la nominación de Zachary Hicks (Guy Kibbee), un candidato inesperado, «tan necio que cada vez que abre la boca resta algo de la suma total de los conocimientos humanos». Sabiendo que Hicks, si se le deja obrar por su cuenta, puede destruir las posibilidades de victoria del partido, sus seguidores están de acuerdo en que es necesario un especialista para dirigir la campaña.

Kay Russell (Bette Davis), leal colaboradora del partido, sugiere que se contrate para esta tarea a Hal Blake (Warren William). Veterano de las contiendas políticas, Blake ha sido útil a la hora de ayudar a candidatos poco adecuados a ganar las elecciones. Los consejeros del partido acceden con entusiasmo, hasta que se enteran de que Blake está en la cárcel por haberse retrasado en el pago de la pensión alimenticia a su ex esposa Maybelle (Vivienne Osborne). Kay, enamorada de Blake, persuade al comité para que vayan a verle, después de recordarles que muchos hombres importantes -Mark Twain, Oscar Wilde, Colón, etc.- pasaron temporadas en prisión. Al oír a Blake pronunciar un discurso sobre los derechos humanos ante sus compañeros de celda, los consejeros quedan tan impresionados que pagan la fianza y el dinero que debe en concepto de pensión alimenticia, y le ordenan que empiece a trabajar enseguida.

 

    

 

Al considerar a Hicks como un candidato sin ninguna esperanza, Blake decide que su imagen pública sea la de un hombre sencillo y honrado. Reelabora un discurso de Lincoln para que Hicks lo pronuncie la noche de inauguración de la campaña, pero el candidato de la oposición, que es el primero en hablar, dice el mismo discurso que había de exponer Hicks. Utilizando esto en ventaja propia, Blake denuncia al candidato, acusándole de robar los pensamientos de un difunto. A Hicks, dispensado ya de pronunciar el discurso, se le considera un héroe.

Su gira por el estado es tan efectiva que la oposición inicia una campaña de difamación para asegurar su derrota y preparar una encerrona que compromete a Blake con Maybelle. Para evitar el escándalo, Blake vuelve a casarse con ella en una ceremonia a bordo del avión, camino de la capital estatal. Kay no aprueba esta maniobra, pero después de que Hicks gana las elecciones y de que Blake le explique que este nuevo casamiento no es válido, accede a casarse con él. Al enterarse de que ha sido burlada, Maybelle recuerda a Blake que debe continuar con sus pagos de la pensión alimenticia

 

 

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